Las redes sociales son una de las mejores herramientas para distribuir enlaces acortados, pero hay que hacerlo con inteligencia. Si abusas, las plataformas pueden marcarte como spam.

El primer truco es crear contexto. No publiques solo el enlace: acompáñalo con una descripción atractiva, una imagen o un dato útil. Así, la gente sentirá curiosidad por hacer clic.

También puedes variar los formatos: historias, videos cortos o publicaciones interactivas. Cuanto más natural parezca tu contenido, mejor será la respuesta del público.

No olvides revisar las normas de cada red. Algunas no permiten enlaces con publicidad intermedia, así que verifica antes de compartir.

Por último, mantén la coherencia. Comparte contenido relacionado con tu temática principal. Si hablas de tecnología, tus enlaces deben apuntar a recursos tecnológicos; si tu nicho es salud, mantén ese enfoque.

Con disciplina, creatividad y respeto por tus seguidores, las redes sociales pueden convertirse en tu mejor aliado para monetizar con acortadores